Queridos Hermanos en Cristo y en la Santísima Virgen de la Cabeza:
Sirvan estas líneas, para expresaros todo mi cariño y mi gratitud, por haber recibido de todos vosotros, toda vuestra confianza, todo vuestro cariño, por tantas muestras de afecto recibidas, y al mismo tiempo, deciros, que es para mí, una responsabilidad que acepto con predisposición de acogida y compromiso, todo por amor a la Stma. Virgen de la Cabeza, y a su Bendito Hijo.
Es un para mí privilegio, el poder dedicarme y entregarme en cuerpo y alma, a extender la devoción de la Stma. Virgen de la Cabeza, y a seguir trabajando de manera incansable por nuestra cofradía en todo aquello que sea necesario, velando por el cumplimiento de las normas que la rigen para su buen funcionamiento, promoviendo la participación activa de todos y cada uno de los que la formamos, en todas y cada una de las actividades que se desarrollen, para crecimiento personal en la fe de todos y cada uno de nosotros.
Son muchas las ilusiones, y muchos los proyectos que se quieren realizar en los próximos cuatro años, por eso os invito desde aquí, a que seáis partícipes, responsables del futuro de nuestro cofradía, y colaboréis con cada uno de los vocales y correspondientes vocalías (Caridad, Formación, Juventud, Casa de Hermandad, etc….), ya que ser cofrade de la Stma. Virgen de la Cabeza, es ser cofrade los 365 días del año, llevándola en nuestro corazón, pero a la vez colaborando en la medida de lo posible con nuestra cofradía de manera activa, nuestro futuro depende de ello, y en especial la asistencia a los cultos.
Es por ello, que la fe vivida y celebrada, debe llevarnos a una coherencia de vida cristiana, basado sobre todo en la caridad.
Primeramente, valorando el componente personal, ya que el valor humano, es decir, todos vosotros, o mejor dicho, la unión y el trabajo en común de todos los cofrades, es lo que hacen grande una cofradía o hermandad.
Lo que aquí expongo, es un camino de trabajo, de esfuerzo común, donde la fe en Nuestra Madre la Santísima Virgen de la Cabeza, y su Bendito Hijo, sea el nexo de unión entre todos sus hijos y devotos, dejando de lado las diferencias de opinión, de sentir, donde la fe, nos conmueva a un camino personal de conversión cada vez mayor, un camino de Santidad, para alcanzar algún día de la mano de la Virgen, la Vida Eterna.
Como veis, lo que con ello quiero decir, es que la vida cofrade, no puede quedar relegada a una mera actividad asociativa o lúdica, sino va acompañada precisamente de la FE VIVIDA Y CELEBRADA, participativa de la VIDA DE LA IGLESIA, Y SUS SACRAMENTOS, ASÍ COMO DEL CONOCIMIENTO DE LA MISMA, PRECISAMENTE PARA DAR RAZÓN DE NUESTRA FE.
La alegría de ser Hijos de Dios, y de la Santísima Virgen de la Cabeza, nos tiene que llevar, a ser unos cofrades comprometidos, alegres, llenos de esperanza, con amor al prójimo y al trabajo desinteresado por los demás, y aquellos que nos necesitan.
Por eso, para empezar este proyecto, os pido una cosa de corazón, que empecemos a trabajar en él, unidos, siendo humildes y sencillos de corazón, sin juzgar a los demás, y sin ninguna premisa, y sobre todo, no demos por hecho, que sabemos todo sobre nuestra fe, y empecemos a trabajar todos, participando y aprendiendo desde cero juntos.
Por todo ello, os doy personalmente las gracias, en nombre de todos y cada uno de los miembros de la nueva Junta de Gobierno, con la certeza de que la Stma. Virgen de la Cabeza guiará nuestro camino.
¡Viva la virgen de la Cabeza!
¡Viva la Morenita!
¡Viva la Reina de Sierra Morena!
¡Viva el Chocolatín Bendito¡ ¡Viva la Virgen de la Cabeza!
¡Viva la Cofradía de Alcalá de Henares!